Cortesía (Ye
Ui):
La cortesía se basa en tratar a los demás como a uno le gustaría que le tratasen, con respeto, educación y atención. Los preceptos de la cortesía para desarrollar un carácter noble y conducir el entrenamiento de manera ordenada son:
1. Promover un
espíritu de mutuas concesiones.
2. Admitir y
corregir los defectos propios, siendo condescendiente con los de los demás.
3. Ser educado.
4. Alentar un
sentido humanitario y de justicia.
5. Distinguir
al instructor del alumno, al veterano del novato, al mayor del más joven.
6. Comportarse
de acuerdo a la situación.
7. Respetar las
posesiones de los demás.
8. Practicar la
honestidad y sinceridad.
9. Abstenerse
de aceptar algún favor o soborno.
Integridad (Yom
Chi):
La integridad hace referencia a la capacidad de ser responsable de los propios actos mediante la conciencia y consecuencia respecto a lo que se sabe correcto o equivocado. El trabajo de la integridad nos lleva a reconocer lo correcto de lo incorrecto, de forma que cuando se haga lo incorrecto, existirá la suficiente conciencia para asumir la disculpa y remendar los errores de forma activa.
Perseverancia
(In Nae):
“La paciencia conduce a la virtud. Se puede construir un hogar pacífico siendo paciente cien veces”, reza un viejo proverbio oriental. Tener perseverancia es ser capaz de volver al principio, tener paciencia, confianza, y saber que, con suficiente intención y preparación, nada es imposible y ningún obstáculo es demasiado grande.
Una persona
paciente, tiene posibilidad de mejorar y perfeccionar una técnica. Uno de los
secretos principales para convertirse en un líder del Taekwondo, es afrontar
cada dificultad con perseverancia. Confucio dijo: “Aquel que es impaciente en
cuestiones triviales, rara vez logrará éxito en cuestiones de mucha
importancia”.
Autocontrol
(Guk Gi):
Para un artista marcial, éste es quizás el principio más importante. La confianza y la preparación física derivadas del entrenamiento deberían ir acompañadas de saber utilizar dichas capacidades en su justa medida, con responsabilidad y templanza. Este principio es muy importante fuera y dentro del dojang, tanto para conducirse en los asuntos personales, como en el combate. Una pérdida del control en el combate, puede acarrear resultados desastrosos para el estudiante y para el oponente. La incapacidad para conducirse en el trabajo y en la vida en general, es también falta de autocontrol.
“La esencia de la fortaleza, consiste en vencerse a sí mismo más que a algún otro”.
Espíritu
Indomable (Baekjul Bool Gool):
Se refleja cuando una persona valerosa se enfrenta por sus principios a situaciones difíciles. Esto implica seriedad, sentido de la justicia, modestia y honestidad. Si el estudiante y artista marcial se cruza con lo que sabe que es una injusticia, debe enfrentarse a ella, sin miedo ni duda, con espíritu indomable, sin considerar quién y cómo sea.
Confucio declaró: “es un acto de cobardía no alzar la voz contra la injusticia. La historia ha probado que aquellos que siguieron sus sueños diligente y enérgicamente, con espíritu indomable, nunca fallaron en obtener sus metas”.